Hernia

Protrusión de un órgano o tejido a través de una abertura. Normalmente, una hernia afecta al estómago o al intestino.

Esta hernia se produce a través del diafragma. El estómago u otros órganos empujan hacia la cavidad torácica. Pueden ser sencillas o bastante complejas. Estas hernias pueden dar lugar a reflujo (enlace) y provocar acidez estomacal. Pueden comprimir el pulmón y provocar dificultad respiratoria. Estas hernias suelen repararse por vía laparoscópica o robótica con una malla. Si el defecto es demasiado grande o crónico, puede ser necesaria una consulta torácica o una operación abierta.

Se producen a través del ombligo o muy cerca de él. Estas hernias pueden agrandarse con el tiempo, volverse muy dolorosas o incluso debilitantes. Pueden llegar a desfigurar y dar lugar a una gran protuberancia.

Estas hernias suelen repararse por vía laparoscópica con una malla. Si el defecto es demasiado grande o crónico, puede ser necesaria una operación abierta. Si esto es necesario, la incisión y la recuperación puede ser más extensa. Esto se discutirá durante su visita a la oficina antes de la cirugía. 

Es la hernia más frecuente. El intestino delgado y/o el revestimiento de la cavidad abdominal, llamado peritoneo, pueden sobresalir a través del canal inguinal. Estas hernias pueden agrandarse con el tiempo, volverse muy dolorosas o incluso debilitantes. Las hernias inguinales pueden provocar alteraciones intestinales y vesicales. 

Las hernias masculinas suelen repararse de forma electiva, mientras que las mujeres con hernias inguinales deben repararse de forma urgente. Es decir, haremos los arreglos necesarios para repararlas en una semana si es posible. 

Estas hernias se reparan por vía laparoscópica con una malla. Si el defecto es demasiado grande o crónico y requiere una operación abierta, el Dr. Carlton puede remitirlo a otro cirujano, ya que la recuperación y la estancia en el hospital serán probablemente más complicadas.